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El relativismo moral del liberalismo
Sánchez Dragó ha escandalizado a la opinión pública con los comentarios de su libro “Dios los cría…”. El escritor ha presumido de liberal muchas veces, también cuando hasta hace poco era presentador de un informativo en Telemadrid y como liberal defendía la libertad individual como un valor superior, una libertad individual sin una referencia objetiva que la oriente. Dragó cree sólo en lo que quiere creer y como a muchos "intelectuales" liberales le apetece más romper las reglas que seguir las normas morales que hemos heredado.
¿Y quién se lo puede reprochar, si el liberalismo como concepto propone que cada cual es libre de pensar como le apetezca?, sólo se le exige que cumpla la ley civil. Pero como no existe una referencia objetiva también la ley es consecuencia de la libre opinión de la gente, de la suma de las opiniones subjetivas que se han puesto de acuerdo sobre algo por mayoría. Y en este caso "el algo" es todo, porque la opinión de la mayoría opina e interviene en todo.
La mayoría es capaz de decidir que la institución de la familia ya no es lo que ha sido hasta ahora, y pasa a ser algo relativo, y que familia pueda ser la unión de dos hombres que practican la sodomía y adoptan los hijos de otros. O que el embrión de ser humano, es discutible y depende de las opiniones que sea humano, y como existe "debate" sobre de su humanidad se le puede matar, además sin tener en cuenta que sufre. Si el liberalismo es capaz de aceptar estas ideas que surgen de la libertad individual y son "legalizadas" por la mayoría ¿de qué nos extrañamos si por esta misma libertad individual un adulto decide tener relaciones sexuales con unas menores? ¿qué límite moral podemos usar para acusarle?.. sólo la ley civil.
Pero la ley civil no es una orientación moral, es sólo un acuerdo mayoritario sobre algo y lo que hoy es delito o reprobable aunque no sea delito, mañana puede ser legal y asumido socialmente. La opinión de la inmoralidad de la pedofilía ahora mayoritaria puede cambiar y volverse tolerante hacia esta práctica, porque la opinión de lo que es moral o inmoral en la sociedad navega "al pairo" y acaba dependiendo de modas, o de lo que los medios de comunicación, radio, tv, cine, prensa... etc quieran promocionar en cada momento y sabemos que éstos tienen poder para dirigir a las masas, quizás por eso no haya un medio de comunicación importante en España que sea realmente independiente y no siga a una corriente ideológica. Ya ha habido un partido político en Holanda que ha propuesto legalizar la pederastia y desde nuestras instituciones se promociona prácticas sexuales variadas en los menores, también la homosexualidad. Vemos ejemplos de que "lo moral" depende del resultado de unas elecciones.
Lo que llama más la atención de Dragó es que afirme públicamente que ha mantenido relaciones con dos chicas de 13 años y lo cuente como si tal cosa sin ningún sentimiento de culpa. Dragó cuando escribió el libro no tenía conciencia de que lo que hizo con las chicas estaba mal, que causó un perjuicio grave a unas adolescentes que no tenían aún una mentalidad formada. Esta "frialdad" moral nos puede parecer extrema, pero es consecuencia del relativismo moral que se promueve en nuestra sociedad, Dragó ha llevado este relativismo moral a sus últimas consecuencias, el relativismo que conduce a apagar las conciencias.
En nuestro sistema político está implícito que no existe una verdad orientativa que deba ser tenida siempre en cuenta y por lo tanto lo moral o inmoral en la sociedad es algo subjetivo y variable, porque depende de la libertad individual que es un valor superior. Quizás haya quién piense con buena intención que es posible compaginar nuestro sistema liberal-democrático con unos valores morales objetivos, los valores cristianos en nuestro caso, pero en lo que hoy se llama democracia, conceptualmente no está planteado que esto pueda suceder y se ve reflejado en la práctica, sobre todo en el relativismo moral.
Cuando Dragó escribió el relato con la menores desde el punto de vista de su libertad individual y su moral esto no suponía algo inmoral, y para el liberalismo como concepto general, los que nos escandalizamos ahora de este relato lo hacemos desde nuestra moral que también es subjetiva y que tiene relevancia según este asumida por la opinión pública, pero esta opinión no es una referencia fija y puede variar. El concepto de democracia-liberal no admite una opinión moral fija de algo para siempre. Para el liberalismo incluso la moral católica es una moral subjetiva y aunque la respete en general como algo positivo no le da más valor que a otros valores morales, le da el mismo.
Nos escandalizamos de lo escrito por Dragó, pero hemos asumido socialmente que se descuartice a los niños antes de nacer, y nos da igual que nos enseñen fotografías de niños despedazados, nos da igual ver la realidad del aborto, porque consideramos que la libertad individual de la madre y sus allegados está por encima de la vida de estos niños, ¿de qué nos escandalizamos cuando Dragó desde su también libertad individual abusa de dos chicas adolescentes y lo cuenta como una cosa normal? ¿no asumimos como normal el asesinato de los no-nacidos, no se felicitan por haberlo conseguido las ministras de este gobierno?
El relativismo moral del liberalismo
Sánchez Dragó ha escandalizado a la opinión pública con los comentarios de su libro “Dios los cría…”. El escritor ha presumido de liberal muchas veces, también cuando hasta hace poco era presentador de un informativo en Telemadrid y como liberal defendía la libertad individual como un valor superior, una libertad individual sin una referencia objetiva que la oriente. Dragó cree sólo en lo que quiere creer y como a muchos "intelectuales" liberales le apetece más romper las reglas que seguir las normas morales que hemos heredado.
¿Y quién se lo puede reprochar, si el liberalismo como concepto propone que cada cual es libre de pensar como le apetezca?, sólo se le exige que cumpla la ley civil. Pero como no existe una referencia objetiva también la ley es consecuencia de la libre opinión de la gente, de la suma de las opiniones subjetivas que se han puesto de acuerdo sobre algo por mayoría. Y en este caso "el algo" es todo, porque la opinión de la mayoría opina e interviene en todo.
La mayoría es capaz de decidir que la institución de la familia ya no es lo que ha sido hasta ahora, y pasa a ser algo relativo, y que familia pueda ser la unión de dos hombres que practican la sodomía y adoptan los hijos de otros. O que el embrión de ser humano, es discutible y depende de las opiniones que sea humano, y como existe "debate" sobre de su humanidad se le puede matar, además sin tener en cuenta que sufre. Si el liberalismo es capaz de aceptar estas ideas que surgen de la libertad individual y son "legalizadas" por la mayoría ¿de qué nos extrañamos si por esta misma libertad individual un adulto decide tener relaciones sexuales con unas menores? ¿qué límite moral podemos usar para acusarle?.. sólo la ley civil.
Pero la ley civil no es una orientación moral, es sólo un acuerdo mayoritario sobre algo y lo que hoy es delito o reprobable aunque no sea delito, mañana puede ser legal y asumido socialmente. La opinión de la inmoralidad de la pedofilía ahora mayoritaria puede cambiar y volverse tolerante hacia esta práctica, porque la opinión de lo que es moral o inmoral en la sociedad navega "al pairo" y acaba dependiendo de modas, o de lo que los medios de comunicación, radio, tv, cine, prensa... etc quieran promocionar en cada momento y sabemos que éstos tienen poder para dirigir a las masas, quizás por eso no haya un medio de comunicación importante en España que sea realmente independiente y no siga a una corriente ideológica. Ya ha habido un partido político en Holanda que ha propuesto legalizar la pederastia y desde nuestras instituciones se promociona prácticas sexuales variadas en los menores, también la homosexualidad. Vemos ejemplos de que "lo moral" depende del resultado de unas elecciones.
Lo que llama más la atención de Dragó es que afirme públicamente que ha mantenido relaciones con dos chicas de 13 años y lo cuente como si tal cosa sin ningún sentimiento de culpa. Dragó cuando escribió el libro no tenía conciencia de que lo que hizo con las chicas estaba mal, que causó un perjuicio grave a unas adolescentes que no tenían aún una mentalidad formada. Esta "frialdad" moral nos puede parecer extrema, pero es consecuencia del relativismo moral que se promueve en nuestra sociedad, Dragó ha llevado este relativismo moral a sus últimas consecuencias, el relativismo que conduce a apagar las conciencias.
En nuestro sistema político está implícito que no existe una verdad orientativa que deba ser tenida siempre en cuenta y por lo tanto lo moral o inmoral en la sociedad es algo subjetivo y variable, porque depende de la libertad individual que es un valor superior. Quizás haya quién piense con buena intención que es posible compaginar nuestro sistema liberal-democrático con unos valores morales objetivos, los valores cristianos en nuestro caso, pero en lo que hoy se llama democracia, conceptualmente no está planteado que esto pueda suceder y se ve reflejado en la práctica, sobre todo en el relativismo moral.
Cuando Dragó escribió el relato con la menores desde el punto de vista de su libertad individual y su moral esto no suponía algo inmoral, y para el liberalismo como concepto general, los que nos escandalizamos ahora de este relato lo hacemos desde nuestra moral que también es subjetiva y que tiene relevancia según este asumida por la opinión pública, pero esta opinión no es una referencia fija y puede variar. El concepto de democracia-liberal no admite una opinión moral fija de algo para siempre. Para el liberalismo incluso la moral católica es una moral subjetiva y aunque la respete en general como algo positivo no le da más valor que a otros valores morales, le da el mismo.
Nos escandalizamos de lo escrito por Dragó, pero hemos asumido socialmente que se descuartice a los niños antes de nacer, y nos da igual que nos enseñen fotografías de niños despedazados, nos da igual ver la realidad del aborto, porque consideramos que la libertad individual de la madre y sus allegados está por encima de la vida de estos niños, ¿de qué nos escandalizamos cuando Dragó desde su también libertad individual abusa de dos chicas adolescentes y lo cuenta como una cosa normal? ¿no asumimos como normal el asesinato de los no-nacidos, no se felicitan por haberlo conseguido las ministras de este gobierno?
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