Titulares optimistas
Esta semana después que el Partido Popular publicara su programa electoral un periódico conservador de Madrid lo analizaba comparándolo con el del PSOE y titulaba un apartado; «Proteger la vida frente al laicismo», y añadía; «Modificación de la actual regulación sobre el aborto para reforzar la protección del derecho a la vida y a las menores».
Y es cierto que los socialistas han promovido un laicismo radical y el aborto como un derecho que ahora defienden como conquista, pero creemos que frente a eso argumentar que el PP protege la vida es inducir a error a los lectores. Porque Rajoy ya ha dicho que de la nueva ley sólo va a modificar que las niñas de 16 años puedan abortar sin el conocimiento de sus padres, hasta ahora ha sido su único compromiso y lo que ha añadido a esto en su programa no le compromete a nada concreto. Dice que están buscando una fórmula para proteger mejor la vida que la situación actual (lo ha repetido en ABC punto radio), no se comprometen a cambiar la ley actual y por lo que parece harán alguna modificación que no especifican. Dicen que aún están buscando la fórmula para hacerlo y eso significa que quién les vote teniendo en cuenta el tema del aborto no sabe qué medidas que "protejan la vida" está votando realmente, salvo lo del tema de las menores.
Y añade Rajoy que esta fórmula estaría en consonancia con lo aprobado ya por el Tribunal Constitucional, la ley anterior del aborto que dan por buena. Considerar que la ley anterior que provocó más de un millón abortos es una ley que protegía la vida es por lo menos cuestionable. La ley anterior permitía abortar sólo porque el feto padeciese una minusvalía y tenía el coladero de la salud síquica de la madre, entre otras cosas.
Lo malo de este tipo de titulares es que inducen a que el votante conservador bienintencionado crea que realmente está apoyando proteger la vida frente a quién propone el aborto, pero como se da una imagen desde nuestro punto de vista optimista del Partido Popular, el votante apoya algo que no es lo cree que está apoyando. Y lo peor es que así nunca se solucionará el drama del aborto, si los que están en contra de éste creen que están apoyando mayoritariamente a un partido que parece que "protege la vida" y en la práctica no lo hace, en la práctica la protección a la vida es algo que se queda sin hacer. Y esto ocurre en parte con la colaboración de medios conservadores y por la ambigüedad de los dirigentes y representantes del partido... Si ni siquiera el votante que está sinceramente a favor de la vida la apoya en política por estas causas ó por otras, ¿quién queda al final que defienda a los no-nacidos y que intente cambiar las leyes más allá de participar en manifestaciones festivas y mensajes y blogs en internet...?
Estas prácticas sirven al beneficio del partido porque le hacen no perder los votos de los contrarios al aborto, aunque esto se haga con la buena intención de que no ganen "los peores", los progresistas, pero no sirve a la causa de la defensa de la vida que según pasan las elecciones va cediendo terreno, lo que ayer era una nueva ley Aido inadmisible, hoy es admisible con algunos retoques y así pasa siempre... Y hasta se puede llegar a influir en la mentalidad inconsciente de los contrarios al aborto y llegar a minimizar el drama que supone asumiendo que apoyar unos retoques de la ley actual ó apoyar la ley anterior es ser defensor de la vida.
Habrá quién diga que no plantemos alternativas realistas a la situación actual del aborto y su aceptación social quizás mayoritaria, pero lo que no parece realista es pensar que seguir así indefinidamente elecciones tras elecciones votando al "mal menor" sea la solución del aborto. Y si lo sensato es buscar otras fórmulas. Porque además el "mal mayor" de los progresistas que nos fuerza a pensar en el mal menor siempre existirá, si hoy Rubalcaba nos parece malo, igual nos lo parecerá quién le suceda, Carmén Chacón ó Tomás Gómez por poner unos ejemplos... Esta es una de las trampas de este sistema.
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Esta semana después que el Partido Popular publicara su programa electoral un periódico conservador de Madrid lo analizaba comparándolo con el del PSOE y titulaba un apartado; «Proteger la vida frente al laicismo», y añadía; «Modificación de la actual regulación sobre el aborto para reforzar la protección del derecho a la vida y a las menores».
Y es cierto que los socialistas han promovido un laicismo radical y el aborto como un derecho que ahora defienden como conquista, pero creemos que frente a eso argumentar que el PP protege la vida es inducir a error a los lectores. Porque Rajoy ya ha dicho que de la nueva ley sólo va a modificar que las niñas de 16 años puedan abortar sin el conocimiento de sus padres, hasta ahora ha sido su único compromiso y lo que ha añadido a esto en su programa no le compromete a nada concreto. Dice que están buscando una fórmula para proteger mejor la vida que la situación actual (lo ha repetido en ABC punto radio), no se comprometen a cambiar la ley actual y por lo que parece harán alguna modificación que no especifican. Dicen que aún están buscando la fórmula para hacerlo y eso significa que quién les vote teniendo en cuenta el tema del aborto no sabe qué medidas que "protejan la vida" está votando realmente, salvo lo del tema de las menores.
Y añade Rajoy que esta fórmula estaría en consonancia con lo aprobado ya por el Tribunal Constitucional, la ley anterior del aborto que dan por buena. Considerar que la ley anterior que provocó más de un millón abortos es una ley que protegía la vida es por lo menos cuestionable. La ley anterior permitía abortar sólo porque el feto padeciese una minusvalía y tenía el coladero de la salud síquica de la madre, entre otras cosas.
Lo malo de este tipo de titulares es que inducen a que el votante conservador bienintencionado crea que realmente está apoyando proteger la vida frente a quién propone el aborto, pero como se da una imagen desde nuestro punto de vista optimista del Partido Popular, el votante apoya algo que no es lo cree que está apoyando. Y lo peor es que así nunca se solucionará el drama del aborto, si los que están en contra de éste creen que están apoyando mayoritariamente a un partido que parece que "protege la vida" y en la práctica no lo hace, en la práctica la protección a la vida es algo que se queda sin hacer. Y esto ocurre en parte con la colaboración de medios conservadores y por la ambigüedad de los dirigentes y representantes del partido... Si ni siquiera el votante que está sinceramente a favor de la vida la apoya en política por estas causas ó por otras, ¿quién queda al final que defienda a los no-nacidos y que intente cambiar las leyes más allá de participar en manifestaciones festivas y mensajes y blogs en internet...?
Estas prácticas sirven al beneficio del partido porque le hacen no perder los votos de los contrarios al aborto, aunque esto se haga con la buena intención de que no ganen "los peores", los progresistas, pero no sirve a la causa de la defensa de la vida que según pasan las elecciones va cediendo terreno, lo que ayer era una nueva ley Aido inadmisible, hoy es admisible con algunos retoques y así pasa siempre... Y hasta se puede llegar a influir en la mentalidad inconsciente de los contrarios al aborto y llegar a minimizar el drama que supone asumiendo que apoyar unos retoques de la ley actual ó apoyar la ley anterior es ser defensor de la vida.
Habrá quién diga que no plantemos alternativas realistas a la situación actual del aborto y su aceptación social quizás mayoritaria, pero lo que no parece realista es pensar que seguir así indefinidamente elecciones tras elecciones votando al "mal menor" sea la solución del aborto. Y si lo sensato es buscar otras fórmulas. Porque además el "mal mayor" de los progresistas que nos fuerza a pensar en el mal menor siempre existirá, si hoy Rubalcaba nos parece malo, igual nos lo parecerá quién le suceda, Carmén Chacón ó Tomás Gómez por poner unos ejemplos... Esta es una de las trampas de este sistema.
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