El descanso dominical
Promover quitar el descanso dominical al comercio deja la sensación de que se quiere primar la eficacia económica a costa de eliminar un poco más la presencia de la religión en la sociedad, aunque esa no sea su motivación. Además de entorpecer la práctica religiosa de los trabajadores, quitar el domingo como festivo es quitar un día a la semana dedicado a la práctica de la religión (además de al ocio), ó al menos ayuda a que se tenga su referencia. Los no practicantes saben que el domingo es festivo porque está dedicado al Señor, en la medida que se pierdan las referencias religiosas en la vida cotidiana se irá fomentando más el ateísmo práctico, el de los que viven como si Dios no existiese, y cogerá más fuerza el materialismo si consumir es precisamente lo que se facilita.
La motivación quizás no sea atacar a la religión como en las medidas que suelen promover los progresistas sino que se plante por una cuestión en teoría pragmática, cuanto más tiempo estén las tiendas abiertas más venderán y eso beneficiará a la economía, ¿pero realmente beneficia a la sociedad ayudar a que vaya perdiendo las referencias religiosas también en el calendario?.
Esta crisis no la ha creado que los españoles trabajen poco tiempo, sino un desequilibrio al hacer que la economía creciese artificialmente, creándonos la ilusión de que teníamos más riqueza de la que teníamos en realidad, por ello gastamos en exceso, nos endeudamos y ahora tenemos que pagarlo.
Quizás alguien debería replantear que la idea de que la economía tal y como es ahora sea capaz de regularse siempre sola cuando produce regularmente este tipo de desequilibrios técnicos ó burbujas como nuestra crisis ó el crack del 29. Que además acaban pagando más los más desafortunados. Pero debe ser difícil plantearse que se está en una burbuja económica cuando todo aparentemente va bien ó muy bien en los datos económicos y los políticos son por principio corto-placistas con vistas a cuatro años y por lo que trabajan es por no perder votos. El cortoplacismo de los políticos está también en las causas de la crisis.
El caso es que incidir en que lo único importante es el progreso material es incidir en las causas de la crisis, en este caso fomentando el consumismo a costa del día de descanso dominical. Cuando sería incluso desde un punto de vista práctico más interesante trabajar para recuperar los valores cristianos. Buena parte de nuestros males vienen de los ataques a la familia como institución a causa de la secularización y las ideas que ha ido introduciendo el progresismo cultural y que ya se han quedado. Con el modelo de familia tradicional, el que duraba toda la vida y tenían varios hijos hubiera sido difícil que se crease una burbuja económica porque no había dinero sobrante para poder especular, lo que ganaban las familias lo gastaban en la economía real, al mismo tiempo al ser varios de familia no decaía el consumo. Los hijos al ser varios hermanos estaban acostumbrados a hacer sacrificios y eran más austeros porque tenían menos comodidades y caprichos, y algunos empezaban a trabajar antes (la cultura del esfuerzo). Como las familias tenían varios hijos no podían ser todos licenciados universitarios (ahora tenemos de sobra) y así no había trabajos que los españoles no quisieran hacer, en el campo, en la construcción... no había preocupación por el futuro de las pensiones porque había suficiente relevo generacional.
A su vez lo que hubieran ingresado las administraciones vía impuestos no se hubiera inflado artificialmente con burbujas, sino que lo que recaudasen poco ó mucho correspondería a la economía real, y por ello no se hubieran endeudado contando con unos ingresos inflados que no se podían mantener indefinidamente porque no eran reales (¿cómo no vieron esto los políticos de las administraciones públicas que se endeudaron gravemente?).
Así creemos que en la raíz de esta crisis está el modelo de sociedad actual que empezó a gestarse aprobando leyes contra la familia como el divorcio y el aborto y cosas como quitar el descanso dominical es incidir en este error. Hacer que la gente trabaje más tiempo, que no tenga festivos ó ayudar a que se pierdan las referencias religiosas en la sociedad puede afectar a la familia, y la institución familiar ya está en crisis... Saldremos de esta crisis (hasta que tengamos otra), ¿pero y cosas como la falta de nacimientos?, ¿qué va a ocurrir dentro de pocos años cuando no haya suficientes jóvenes para mantener a todos los jubilados?...
Promover quitar el descanso dominical al comercio deja la sensación de que se quiere primar la eficacia económica a costa de eliminar un poco más la presencia de la religión en la sociedad, aunque esa no sea su motivación. Además de entorpecer la práctica religiosa de los trabajadores, quitar el domingo como festivo es quitar un día a la semana dedicado a la práctica de la religión (además de al ocio), ó al menos ayuda a que se tenga su referencia. Los no practicantes saben que el domingo es festivo porque está dedicado al Señor, en la medida que se pierdan las referencias religiosas en la vida cotidiana se irá fomentando más el ateísmo práctico, el de los que viven como si Dios no existiese, y cogerá más fuerza el materialismo si consumir es precisamente lo que se facilita.
La motivación quizás no sea atacar a la religión como en las medidas que suelen promover los progresistas sino que se plante por una cuestión en teoría pragmática, cuanto más tiempo estén las tiendas abiertas más venderán y eso beneficiará a la economía, ¿pero realmente beneficia a la sociedad ayudar a que vaya perdiendo las referencias religiosas también en el calendario?.
Esta crisis no la ha creado que los españoles trabajen poco tiempo, sino un desequilibrio al hacer que la economía creciese artificialmente, creándonos la ilusión de que teníamos más riqueza de la que teníamos en realidad, por ello gastamos en exceso, nos endeudamos y ahora tenemos que pagarlo.
Quizás alguien debería replantear que la idea de que la economía tal y como es ahora sea capaz de regularse siempre sola cuando produce regularmente este tipo de desequilibrios técnicos ó burbujas como nuestra crisis ó el crack del 29. Que además acaban pagando más los más desafortunados. Pero debe ser difícil plantearse que se está en una burbuja económica cuando todo aparentemente va bien ó muy bien en los datos económicos y los políticos son por principio corto-placistas con vistas a cuatro años y por lo que trabajan es por no perder votos. El cortoplacismo de los políticos está también en las causas de la crisis.
El caso es que incidir en que lo único importante es el progreso material es incidir en las causas de la crisis, en este caso fomentando el consumismo a costa del día de descanso dominical. Cuando sería incluso desde un punto de vista práctico más interesante trabajar para recuperar los valores cristianos. Buena parte de nuestros males vienen de los ataques a la familia como institución a causa de la secularización y las ideas que ha ido introduciendo el progresismo cultural y que ya se han quedado. Con el modelo de familia tradicional, el que duraba toda la vida y tenían varios hijos hubiera sido difícil que se crease una burbuja económica porque no había dinero sobrante para poder especular, lo que ganaban las familias lo gastaban en la economía real, al mismo tiempo al ser varios de familia no decaía el consumo. Los hijos al ser varios hermanos estaban acostumbrados a hacer sacrificios y eran más austeros porque tenían menos comodidades y caprichos, y algunos empezaban a trabajar antes (la cultura del esfuerzo). Como las familias tenían varios hijos no podían ser todos licenciados universitarios (ahora tenemos de sobra) y así no había trabajos que los españoles no quisieran hacer, en el campo, en la construcción... no había preocupación por el futuro de las pensiones porque había suficiente relevo generacional.
A su vez lo que hubieran ingresado las administraciones vía impuestos no se hubiera inflado artificialmente con burbujas, sino que lo que recaudasen poco ó mucho correspondería a la economía real, y por ello no se hubieran endeudado contando con unos ingresos inflados que no se podían mantener indefinidamente porque no eran reales (¿cómo no vieron esto los políticos de las administraciones públicas que se endeudaron gravemente?).
Así creemos que en la raíz de esta crisis está el modelo de sociedad actual que empezó a gestarse aprobando leyes contra la familia como el divorcio y el aborto y cosas como quitar el descanso dominical es incidir en este error. Hacer que la gente trabaje más tiempo, que no tenga festivos ó ayudar a que se pierdan las referencias religiosas en la sociedad puede afectar a la familia, y la institución familiar ya está en crisis... Saldremos de esta crisis (hasta que tengamos otra), ¿pero y cosas como la falta de nacimientos?, ¿qué va a ocurrir dentro de pocos años cuando no haya suficientes jóvenes para mantener a todos los jubilados?...
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